ADMINISTRACIÓN DEL EFECTIVO Y CAPITAL DE TRABAJO


CAPITULO I: ADMINISTRACIÓN DEL EFECTIVO

 

1.1.      CONCEPTOS GENERALES

El Gerente Financiero, normalmente, se encuentra ante la disyuntiva de lograr por un lado que exista Liquidez en la empresa, es decir, dinero disponible para el pago de las obligaciones; y por otro lado, que se aplique el dinero disponible en las operaciones del negocio, a fin de maximizar la Rentabilidad, o Productividad, empresarial.

 

Por ello, cuanto más efectivo posea la empresa (Liquidez), más fácilmente podrá cancelar sus deudas, y cuanto más efectivo se utilice en las actividades operativas, se obtendrán mayores beneficios (Rentabilidad).

 

La Liquidez de una empresa está representada por el Activo  Líquido, el que comprende el Efectivo en Caja y Bancos, así como los Valores Negociables (acciones o bonos). Ambos elementos son los componentes básicos de la Administración del Efectivo o del Activo Líquido, que es responsabilidad del Gerente Financiero, el cual tiene en la Administración del Activo Líquido, un elemento muy importante en la dirección financiera a corto plazo.

El Efectivo de Caja y Bancos es el activo más líquido, por cuanto tiene la característica de ser un medio de pago inmediato. El Efectivo en Caja y Bancos está constituido principalmente por los fondos depositados en las cuentas corrientes bancarias, ya que sí bien las empresas disponen, en su mayoría, con el efectivo en Caja Chica, dicho fondo de naturaleza fija es utilizado para desembolsos menores.

 

Últimamente existe la tendencia, o propensión, a ir hacia una reducción al mínimo posible del Efectivo, aplicando; o en otras palabras, invirtiendo, los excedentes de Efectivo en activos que generen una mayor rentabilidad, frente a la alternativa de mantener fondos ociosos. Esta tendencia puede deberse principalmente:

 

  1. A) Al nivel de inflación existente, que deteriora en plazos cada vez más breves, el valor o poder adquisitivo del dinero;
  2. B) A la elevación de las tasas de interés, que hace caro el mantener los recursos financieros; y,
  3. C) Al desarrollo de la Administración Financiera.

 

Los Valores Negociables, denominados también como Valores Realizables, Inversiones Temporales o Cuasi Dinero son títulos valores, o valores mobiliarios, que representan, o contienen, derechos patrimoniales, susceptibles de negociarse y que pueden convertirse fácilmente y á corto plazo en Efectivo.

 

1.2.      ADMINISTRACIÓN DEL EFECTIVO

1.2.1.   Razones para mantener Efectivo

Si bien el Efectivo no le produce ningún interés a la empresa, ésta debe mantener cierto nivel de Efectivo por tres principales razones.

 

  1. a)        Razón Operativa

La empresa debe tener Efectivo, para poder financiar sus actividades operativas, tales como: adquisición de materias primas, pago de mano de obra directa, pago de sueldos, de gastos de administración, de ventas, etc.

 

  1. b) Razón Preventiva

Llamada también Precaucional determina que la empresa debe crear una reserva de Efectivo, que le permita afrontar, por ejemplo, un repentino aumento en el costo de las materias primas o una demora en la recuperación de una deuda, etc.

 

Los saldos en efectivo, con carácter de previsión, se emplean generalmente para solucionar situaciones emergentes.

El nivel de esta especie de colchón de seguridad en efectivo, tiene una gran relación con el grado predecible de los ingresos y egresos de Efectivo, y esta relación es inversa; en el sentido que, cuanto más se puede predecir el Presupuesto de Efectivo de la empresa, menos necesario será mantener Efectivo con carácter de previsión y viceversa.

 

  1. c) Razón Especulativa

La empresa, a través de la Gerencia Financiera, puede mantener efectivo con fines especulativos-, es decir para aprovechar ciertas oportunidades atractivas de inversión; como puede ser: la introducción de un nuevo producto, o adquirir una maquinaria, o una empresa, aprovechar una baja temporal en la cotización de ciertos Valores Negociables de gran rendimiento, una propuesta de fusión, etc..

 

Es al Gerente Financiero a quien corresponde, dentro de la empresa, establecer el nivel de efectivo que se debe asignar para cada una de estas tres razones mencionadas.

 

1.2.2.   El Ciclo de Caja

Una Empresa, normalmente, no puede producir ciertos artículos, venderlos y recibir el pago todo en el mismo día ya que de ser así no necesitaría tener un saldo de caja inicial, porque su Cielo de Caja sería inmediato. Pero las empresas, generalmente, tienen un ciclo operativo que, simplificándolo, se inicia con el  Pedido de las materias primas o la compra al crédito; luego se Recepcionan y Almacenan dichas materias primas; se cancelan las cuentas por pagar girando el cheque respectivo; el Banco le abonará al Cliente, luego de varios días. Las materias primas estarán en el Almacén, hasta que se trasladan y transforman en la producción, convirtiéndose en Productos Terminados, que luego se venderán al crédito y las Cuentas por Cobrar se recuperarán, depositando el cheque del cliente en nuestra cuenta corriente bancaria y luego de varios días nos dará la conformidad el Banco, estando el Efectivo recién disponible para utilizarlo.

 

Para desarrollar el Ciclo de Caja se asume que la producción, las compras y las ventas ocurren a un ritmo constante durante el año. El mismo supuesto se empleará para desarrollar más adelante los conceptos: Rotación de Caja y Caja Mínima.

 

El Ciclo de Caja puede definirse como el tiempo que transcurre e partir del momento que la empresa efectúa un desembolso, pago o egreso real de Caja; por la compra de materias primas, hasta el momento en que se cobra o recupera realmente, por la venta del producto terminado.

 

1.2.3.   Rotación de Caja

Esta Razón, o Ratio, viene a ser el número de veces que la Caja de la empresa rota al año. La rotación de Caja se relaciona con el Ciclo de Caja, de la misma forma en que se relaciona el  Período Promedio de Cobro con la Rotación de Cuentas por Cobrar y el Período Promedio de Pago con la Rotación de Cuentas por Pagar.

 

La Rotación de Caja se calcula dividiendo 360 días (año financiero) entre el Ciclo de Caja.

Cuanto más elevada sea la Rotación de Caja, significa que la empresa requiere de menos Caja; obviamente el resultado obtenido debe ser lo más alto posible; vale decir, que debe maximizarse pero siempre teniendo en consideración que el objetivo no es quedarse sin Caja.

 

1.2.4.   Caja Mínima

Para calcular el nivel mínimo de Caja o Caja Mínima, que debe tener una empresa, se divide los egresos o desembolsos de Caja anuales proyectados, entre la Rotación de Caja, siendo la fórmula para hallar la Caja Mínima, la siguiente:

 

Caja Mínima =            Desembolsos de Caja anuales proyectados

Rotación de Caja

 

El Gerente Financiero debe mantener efectivo en Caja, para atender el vencimiento de sus obligaciones, debido a que el hecho de ser puntual en los pagos, lo mantendrá en buenas relaciones con los acreedores y proveedores, pudiendo aprovechar los descuentos comerciales. Por otro lado, si el Gerente Financiero mantiene un saldo elevado en la cuenta corriente bancaria, el Banco estará muy de acuerdo ya que podrá prestar ese dinero y obtener una utilidad, siendo muy buena la relación entre la empresa y el banco.

 

Pese a lo mencionado, el mantener saldos elevados de efectivo resulta muy costoso, debiendo, por lo tanto, contarse con recursos suficientes y no con excesivas reservas o fondos preventivos, utilizando los excedentes en cualquier tipo de inversión rentable. Debe, pues, minimizarse el saldo de efectivo en Caja, sincronizándose los flujos de efectivo, para lo cual el Gerente Financiero ha debido previamente establecer el horizonte de planeamiento hacia donde se proyectarán los ingresos y egresos de efectivo, que le permitirán obtener el Presupuesto de Efectivo, o Flujo de Caja.

 

1.2.5.   Costos Asociados con los saldos de Caja

En las empresas los saldos de Caja pueden fluctuar y más cuando no existe una adecuada administración del efectivo, por ello en ciertas oportunidades pueden tener saldos de Caja insuficientes y, en otros saldos excesivos. Ambas situaciones generan costos que es importante se conozcan. A continuación se examinarán las dos alternativas:

 

1)         Costos de los saldos de Caja Insuficientes.

A pesar que el Presupuesto en Efectivo estuvo cuidadosamente preparado, puede presentarse algún faltante de Caja, incurriéndose con ello en cierta clase de costos, los cuales estarán en función del monto, la duración, la frecuencia y la forma en que se cubran. Entre los costos más comunes tenemos:

 

  1. A) Costos de Transacción para obtener efectivo

Se da en el caso, que la empresa debe vender algunos de los Valores Negociables (Bonos, Acciones, etc.) para lo cual deberá pagarse una comisión al Agente de bolsa, o  corredor, que lleve a cabo la venta.

 

  1. B) Costo de un préstamo

Este costo se manifiesta cuando la empresa obtiene un préstamo para financiar el faltante. Entre estos costos (que se analizarán más adelante) se tiene: el interés por el préstamo y otros costos asociados con la obtencí6n del mismo.

 

  1. C) Costo de no aprovechar los descuentos

Se da cuando él faltante hace que la empresa no pueda utilizar los descuentos comerciales por pagos adelantados.  El costo obtenido es un ahorro considerable que la empresa perderá, por tener faltantes en Caja. Los costos en que se incurre, por tener saldo en Caja insuficiente, se incrementarán en la medida que la empresa tenga cada vez menos efectivo.

 

2)         Costos de los saldos de Caja Excesivos

En el lado opuesto al rubro anteriormente estudiado, la empresa incurrirá en costos si mantiene saldos de Caja excesivos; ya que el efectivo ocioso hace que la empresa desaproveche oportunidades de colocar tal excedente en inversiones de gran rendimiento. Entre los costos principales tenemos:

 

  1. A) Costos de oportunidad.

El costo de oportunidad es el costo que resulta de una alternativa que ha sido abandonada. Si una empresa tiene efectivo ocioso desaprovechará la posibilidad de colocar los excedentes en inversiones rentables. Por ejemplo, si la compañía Fibras Acrílicas S.A. decide mantener un saldo excesivo en la cuenta corriente bancaria de S/. 100,000 por año, suponiendo una tasa de interés del 10%, el costo de oportunidad de tales fondos sería de S/. 10,000. Este costo de oportunidad se incrementa, junto con el monto de saldos en efectivos ociosos.

 

  1. B) Costos de un préstamo

Se da en el caso que la empresa ha solicitado un préstamo y debido, por ejemplo, a deficiencias en la preparación del Presupuesto de Efectivo; mantiene estacionalmente efectivo ocioso, el cual está devengando un costo, que es el interés por el préstamo y otros costos asociados con su tramitación. En conclusión, el Gerente Financiero debe minimizar los costos por saldos en Caja tanto cuando dichos saldos son insuficientes, o cuando son excesivos.

 

1.2.6.   Estrategias en la Administración del Efectivo

Para lograr una gestión eficiente del Efectivo, el Gerente Financiero puede emplear algunas estrategias, entre las cuales se pueden mencionar principalmente las siguientes:

1)         Aceleración de Cobranzas;

2)         Demora en los Pagos;

3)         Aumento en la Rotación de Inventarios;

4)         Sistema simultáneo; y,

5)         Disminución de la necesidad de saldos preventivos.

CAPITULO II: CAPITAL DE TRABAJO

2.1.      Concepto

El Capital de Trabajo, denominado también Capital en Giro o Fondo de Maniobra, es definido de diversas maneras, entre las que podemos mencionar las siguientes:

  1. El Capital de Trabajo es la diferencia entre el Activo Co­rriente y el Pasivo Corriente de una empresa, esta definición es también aplicable al concepto Capital de Trabajo Neto.

El Activo Corriente comprende el Efectivo en Caja y Bancos, los Valores Negociables (a corto plazo), las Cuentas por Cobrar y los Inventarios o Existencias, vale decir, aquellas cuentas que son o que se van a convertir en efectivo en el plazo máximo de un año.

 

El Pasivo Corriente comprende aquellas obligaciones que se deben pagar en el plazo máximo de un año; tales como los Sobregiros y Préstamos Bancarios, las Cuentas por Pagar Comerciales (o Proveedores) y Otras Cuentas por Pagar (Remuneraciones Personales, Tributos por Pagar o Pasivo Acumulado).

 

Al restar el Pasivo Corriente del Activo Corriente, puede darse el caso que el Activo Corriente sea mayor que el Pasivo Corriente, donde el Capital de Trabajo será positivo o que el Activo Corriente sea igual que el Pasivo Corriente, en donde el Capital de Trabajo será cero o nulo, es decir que la empresa no tiene Capital de Trabajo; y por últi­mo, que el Activo Corriente sea menor que el Pasivo Corriente, en donde el Capital de Trabajo se dice que es nega­tivo. Esta última alternativa puede presentarse en empresas que tienen una razón elevada de Rotación de Inventarios o que poseen un presupuesto de efectivo con ingresos de caja predecibles.

 

  1. El Capital de Trabajo es la parte de los Activos Corrientes que se financian con recursos a largo plazo, es decir, con Pasivos No Corrientes u obligaciones a largo plazo y con Patrimonio Neto, en este último caso con Aporte Accionario o Aporte de Capital.

 

En cuanto a la administración del Activo No Corriente o Activo Fijo, ella forma parte de la evaluación y presupuesto de inversiones que se desarrollará más adelante.

 

  1. El Capital de Trabajo es la inversión de la empresa en Activos Corrientes o a corto plazo, vale decir, efectivo en Caja y Ban­cos, Valores Negociables, Cuentas por Cobrar Comerciales e Inventarios. Debido a que en la mayoría de las empresas el Activo Corriente representa una inversión que llega a ser más de la mitad del Activo Total, requiere de gran atención por parte del Gerente Financiero.

 

2.2.    Importancia del capital de trabajo

El Capital de Trabajo es de gran importancia para el Gerente Financiero y la empresa en general, ya que permite dirigir las acti­vidades operativas, sin restricciones financieras, pudiendo la em­presa enfrentarse a situaciones emergentes sin peligro de un desastre financiero. Además, posibilita el pago oportuno de las deudas u obligaciones, asegurando el crédito de la empresa.

 

Un Capital de Trabajo excesivo, especialmente si se encuentra en efectivo, puede ser tan desfavorable como un Capital de Tra­bajo insuficiente.

 

El monto o nivel del Capital de Trabajo está determinado por la inversión de la empresa en Activo Corriente y en Pasivo Corriente (o endeudamiento a corto plazo); para lo cual se han debido tomar decisiones, en torno a los requerimientos de liqui­dez de la empresa y a los plazos de vencimiento o pago de las deudas a corto plazo.

 

En una empresa, generalmente, cuando menor sea el monto de los Activos Líquidos (Caja y Bancos, Valores Negociables a corto plazo), con respecto al Activo Corriente, mayor será la ren­tabilidad de éste, sobre el total de las inversiones de la empresa.

 

En cuanto al Pasivo Corriente, su rentabilidad estará en fun­ción de los diferentes costos de financiamiento y a la utilización de dicho financiamiento en períodos que no son necesarios.

 

Como se mencionó anteriormente, una empresa puede tener un nivel bajo de Capital de Trabajo o un Capital de Trabajo nega­tivo (Activo Corriente menor que Pasivo Corriente), en este caso, existirá un riesgo, cual es la probabilidad de llegar a la Insolvencia Técnica.

 

En el ámbito empresarial, la insolvencia se produce cuando los Activos son menores que los Pasivos, en cambio la Insolvencia Técnica se produce cuando la empresa es incapaz de cumplir con el pago de sus deudas u obligaciones de caja (o de pago en dinero) a medida que éstos vencen, vale decir, cuando se llega al estado de cesación de pagos.

 

El Capital de Trabajo se utiliza muy a menudo, como medida del riesgo a la Insolvencia Técnica de la empresa.

 

2.3.    Financiación y estructura del activo co­rriente

Para ilustrar claramente la financiación del Activo Corriente, se asume, en primer término, que una empresa financia su Activo Corriente, exclusivamente con Pasivo Corriente, es decir con cré­ditos a corto plazo; y su Activo No Corriente o Activo FUO, con Pasivo No Corriente y Aporte Accionario, es decir con recursos a largo plazo.

 

En esta relación homogénea de financia­ción, observándose además que:

  1. Por un lado el Activo Corriente periódicamente decrece hasta llegar a cero e inme­diatamente se incrementa con nuevo financiamiento vía Pasivo Corriente.
  2. Por otro lado, el Activo No Corriente o Activo Fijo, perma­nentemente se incrementa y es financiado con Pasivo No Corriente y Aporte Ac­cionario.

 

Sin embargo, el Activo Corriente casi nunca llega a cero, lo que determina la introducción de los conceptos Activo Co­rriente Fluctuante, o temporal, y Activo Corriente Permanente.

 

También existe otra alternativa de financiación que se denominará Alternativa ‘A” y donde la em­presa trata de conciliar exactamente los vencimientos del Activo y del Pasivo, al financiar el Activo Corriente Fluctuante con Pasivo Corriente y el Activo Corriente Permanente así como el Activo No Corriente, con Pasivo No Corriente y Aporte Accionario.

 

La estructura de financiación de la Alternativa A, que establece una cobertura de deuda que reduce al mínimo el riesgo de incumplir con el pago de las deudas á su vencimiento, es decir, disminuye el riesgo de la Insol­vencia Técnica. En este sentido, se puede mencionar el caso de una empresa que espera que sus inventarios se vendan en 30 días, ésta puede financiarse con un sobregiro o préstamo ban­cario a 30 días; y si se trata de un pequeño tractor u otra maqui­naria o equipo que dura 5 años, debe buscar financiamiento a cinco años. Cabe señalar, que la incertidumbre, en cuanto a la duración de los Activos, impide una conciliación o coincidencia exacta del vencimiento. Por último, si el Activo Corriente Fluctuante, se financiara con recursos a largo plazo, la empresa estaría pagando intereses por fondos no utilizados en ciertos períodos.

 

Otra alternativa de financiamiento del Activo Corriente, que se denominará Alternativa B, es aquella que se utiliza para finan­ciar, parte del Activo Corriente Permanente y el Activo No Co­rriente con recursos a largo plazo y la otra parte del Activo Corriente Permanente y el Activo Corriente Fluctuante con créditos a corto plazo.

 

2.4.    Costo y riesgo del pasivo corriente y del pa­sivo no corriente

El Activo de una Empresa puede financiarse a través de dos fuentes de fondos, ya sea a corto plazo o a largo plazo. Frecuen­temente las tasas de interés (Costo del Financiamiento) son más bajas o menores, en deudas a corto plazo, que en las deudas a largo plazo. Esto es debido a que, cuando existe la expectativa que las tasas de interés futuras vayan a elevarse, las tasas de préstamo a corto plazo serán menores que las tasas de interés a largo plazo; en cambio, cuando existe la expectativa, que las tasas futu­ras de interés vayan a disminuir, las tasas de interés a largo plazo a menudo se colocan por debajo de las tasas a corto plazo.

 

Las fuentes de fondo a corto plazo, están dadas por el Pasivo Corriente, el cual comprende los Sobregiros y Préstamos banca­rios; las Cuentas por Pagar Comerciales y los Pasivos Acumulados. El Pasivo Corriente es una fuente barata de recursos financieros ya que solamente los Sobregiros y Préstamos Bancarios así como también las Letras por Pagar; tienen un costo expreso, las demás Cuentas por Pagar y los Pasivos Acumulados, generalmente no están sujetos a ningún tipo de interés.

 

La fuente de fondos a largo plazo, está dada por el Pasivo No Corriente es decir las obligaciones a largo plazo y el Aporte Accionario.

Si bien el Pasivo Corriente o deuda a corto plazo, tiene usualmente un financiamiento menor o más barato que el Pasivo No Corriente, existe el riesgo que, el mayor uso del Pasivo Corrien­te como fuente de financiamiento, exponga a la empresa a una mayor probabilidad de caer en la Insolvencia Técnica, que si se financiara con el Pasivo No Corriente.

 

El Riesgo del endeudamiento a corto plazo es debido principalmente a dos razones:

  1. Si una empresa se financia a largo plazo, es decir vía Pasivo No Corriente, el costo de la deuda será relativamente estable en el tiempo; en cambio se si financiara a corto plazo, vale decir con Pasivo Corriente, sus costos por intereses pueden fluctuar mucho llegando en algunos casos a niveles elevados.
  2. Si una empresa, contrae una gran deuda a corto plazo, corre el riesgo de llegar a caer en la Insolvencia, al ser incapaz de poder cancelar dicha deuda.

 

En el caso de una empresa que financia un Activo Corriente con Pasivo Corriente y su Activo No Corriente con recursos a Largo Plazo; bajo esta modalidad de financiamiento, la empresa no tendría Capital de Trabajo, ya que su Activo Corriente sería igual al Pasivo Corriente, presentándose un enorme Riesgo para la Em­presa.

 

Por otro lado el Activo Temporal, fluctuante o estacional, se financia con Pasivo Corriente   el Activo Corriente Permanente y el Activo No Corriente se incrementa y es financiado con Pasivo No Corriente y Aporte Accionario.

 

2.5.    Costo del Pasivo Corriente

El costo del crédito a corto plazo puede estimarse mediante el cálculo del promedio anual del Pasivo Corriente y multi­plicando luego dicho promedio, por la tasa de interés anual.

 

Costo de Pasivo No Corriente

El procedimiento para estimar el Costo del Pasivo No Corriente o fondos a largo plazo es idéntico al caso anterior; en este caso, el Promedio anual del Pasivo No Corriente es multiplicado por la tasa anual de interés, que se asume como aplicable a préstamos a largo plazo, determina el costo del Pasivo No Corriente.

 

Costo Total

El costo total de esta estructura de financiamiento, se obtiene sumando el costo del Pasivo Corriente y el Costo del Pasivo No Corriente. Este valor obtenido es de una mayor consistencia, si se compara con el costo de otras alternativas financieras.

 

En resumen se puede concluir, hasta aquí, que usualmente el costo del Pasivo Corriente es menor que el costo del Pasivo  No Corriente y, a su vez, que el endeudarse a corto plazo supone un Riesgo mayor que endeudarse a largo plazo.

 

2.6.    Relación entre el activo corriente, el activo no corriente y la producción

El Gerente Financiero al establecer el nivel adecuado de Acti­vo Corriente debe tornar en consideración el equilibrio entre Rentabilidad y Riesgo. Los recursos financieros de la empresa se aplican o usan en Activo Corriente y Activo No Corriente, rubros que constituyen inversiones, y cuando una empresa incrementa la inversión en Activo Corriente (principalmente en Activo Líquido) mientras se mantiene constante la inversión en Activo No Co­rriente, se reduce el Riesgo de la empresa.

 

Existe relación a corto plazo entre el Ac­tivo Corriente y el Activo No Corriente (el cual se considera cons­tante) y la producción, asumiéndose tres posibles alternativas en torno al nivel del Activo Corriente. Una alternativa A, Conserva­dora, una alternativa B, o Media y una alternativa C, o Agresiva.

 

En la alternativa Conservadora, se mantienen elevados mon­tos de Activo Líquido (Caja y Bancos y Valores Negociables), se aplica una política de crédito bastante liberal con altos niveles de Cuentas por Cobrar y se mantienen stocks de seguridad de los inventarios.

 

En esta alternativa la Razón o Ratio del Activo Co­rriente sobre Activo No Corriente (AC/ANC) es mayor que en las otras, para todo nivel de actividad. Cuanto más elevada sea la Razón Activo Corriente sobre Activo No Corriente, mayor es la liquidez de la empresa y menor el Riesgo de caer en la Insolvencia Técnica, céteris páribus, es decir siempre y cuando los demás factores permanezcan constantes o inalterables.

 

En la alternativa Agresiva, se mantienen bajos niveles de Ac­tivo Líquido y del Activo Corriente en general, por ello la Razón Activo Corriente sobre Activo No Corriente es menor que en las otras, para todo nivel de actividad o producción. Al ser menor dicha Razón, la liquidez de la empresa será menor y por ello existirá una mayor probabilidad de caer en la Insolvencia Técnica, es decir, que existirá un mayor Riesgo de la empresa.

 

A mayor producción (Al­ternativa A), mayor es la inversión en Activo Corriente, siendo menor el Riesgo y por consiguiente menor la Rentabilidad. La relación es curvilíneal, ya que los Activos Corrientes aumentan a un ritmo decreciente a medida que se incrementa la producción.

2.7.    Sensibilidad de la rentabilidad.- riesgo ante variaciones en activos y pasivos corrientes.

Si una empresa desea incremen­tar su Rentabilidad, debe necesariamente incrementar su Rentabilidad y si desea disminuir su Riesgo, debe disminuir su Rentabilidad.

 

En esta parte del texto se asume que la Rentabilidad se determina por las Utilidades antes de Intereses e Impuestos y que el Riesgo, se determina por la probabilidad de la empresa, de caer en la Insolvencia técnica.

 

Existe una sensibilidad de la Rentabilidad y el Riesgo frente a variaciones en los niveles de los Activos Corrientes y Pasivos Corrientes.

A continuación se examina el efecto de los aumentos o dis­minuciones de los Activos y Pasivos Corrientes sobre la Rentabilidad y el Riesgo de la empresa.

 

  1. Variaciones en Activo Corriente

Para evaluar la sensibilidad de la Rentabilidad-Riesgo por efecto de la variación (aumento o disminución) en el nivel del Activo Corriente, usualmente se emplea la Razón de Activo Corriente sobre Activo Total (AC/AT), obteniéndose como resultado, el porcentaje de Activo Corriente de la empresa. Se asume, en este caso, que el Pasivo Corriente será constante. Para mejor claridad se analizará primero un incremento y luego una disminución en el Activo Corriente.

 

  1. Sensibilidad Rentabilidad- Riesgo ante un aumento en Activo Corriente

Cuando aumenta el Activo Corriente y consecuentemente la Razón Activo Corriente sobre Activo Total (AC/AT), la Rentabilidad de la empresa disminuye debido a que los Activos Corrientes, son menos rentables que los Activos No Corrientes, como ya se demostró anteriormente.

 

Por otro lado, el aumento en el Activo Corriente disminuye el Riesgo de la Insolvencia técnica (siempre y cuando el Pasivo Corriente permanezca constante), ya que aumenta el Capital de Trabajo.

 

  1. Sensibilidad Rentabilidad.- Riesgo ante una disminución en Activo Corriente

Una disminución en Activo Corriente se traduce en una disminución de la Razón Activo Corriente sobre Activo Total y además incrementa la Rentabilidad, porque los Activos No Corrientes son más rentables que los Activos Corrientes. Además, el Riesgo también se incrementa por cuanto, al dis­minuir el Activo Corriente, el Capital de Trabajo será menor. Un ejemplo permitirá aclarar estos efectos, de los niveles de Activos Corrientes sobre la Rentabilidad y Riesgo de la em­presa.

 

  1. Variaciones en Pasivo Corriente

Para evaluar la sensibilidad de la Rentabilidad-Riesgo por efecto de la variación (aumento o disminución) en el nivel del Pasivo Corriente, generalmente se utiliza la Razón Pasivo Corriente sobre Activo Total (PC/AT) obteniéndose como resultado, el por­centaje de los Activos Totales de la empresa, que se financiaron con Pasivo Corriente. Se asume que el Activo Corriente será cons­tante. A continuación se examina el caso, de un aumento y de una disminución del Pasivo Corriente.

 

  1. Sensibilidad Rentabilidad. Riesgo ante un aumento en Pasivo Corriente

Al aumentarse el Pasivo Corriente, aumenta la Razón Pasivo Corriente sobre Activo Total. Del mismo modo, se incre­menta la Rentabilidad de la empresa, debido a que general-mente el costo del Pasivo Corriente, o Crédito a corto plazo, es menor ~ menos caro que el costo del Pasivo No Corriente y toda disminución en costos, genera mayores utilidades.

 

Al aumentarse el Pasivo Corriente, manteniéndose constante el Activo Corriente, el Capital de Trabajo disminuye, lo cual se traduce en un incremento del Riesgo de la Empresa.

 

  1. Sensibilidad Rentabilidad. – Riesgo ante una disminución Pasivo Corriente.

Si el Pasivo Corriente disminuye, disminuye también la Razón Pasivo Corriente sobre Activo Total y la Rentabilidad, ya que deberá financiarse con Pasivo No Corriente o recursos a largo plazo, que son mucho más caros. La disminución en el Pasivo Corriente bajo el supuesto que el Activo Corriente será constante aumentará el Capital de Trabajo, disminuyendo el Riesgo.

 

 

 

CONCLUSIONES

 

  1. Una Empresa, normalmente, no puede producir ciertos artículos, venderlos y recibir el pago todo en el mismo día ya que de ser así no necesitaría tener un saldo de caja inicial, porque su Ciclo de Caja sería inmediato. Para desarrollar el Ciclo de Caja se asume que la producción, las compras y las ventas ocurren a un ritmo constante durante el año. El mismo supuesto se empleará para desarrollar más adelante los conceptos: Rotación de Caja y Caja Mínima.

 

  1. Para calcular el nivel mínimo de Caja o Caja Mínima, que debe tener una empresa, se divide los egresos o desembolsos de Caja anuales proyectados, entre la Rotación de Caja.

 

  1. En las empresas los saldos de Caja pueden fluctuar y más cuando no existe una adecuada administración del efectivo, por ello en ciertas oportunidades pueden tener saldos de Caja insuficientes y, en otros saldos excesivos. Ambas situaciones generan costos que es importante se conozcan.

 

BIBLIOGRAFÍA

 

 

  1. Pedro Alberto Bellido Sánchez. Administración Financiera. Editorial técnico científica S.A.
  2. FLORES SORIA Jaime (2012). Contabilidad Gerencial, Teoría y práctica, Edit. CECOF, 2012, 512 p.