La transformación de las ideas de inversión significa la utilización de recursos (humanos, materiales, financieros, etc.) que van agregando valor a las mismas, a medida que se pasa de la identificación a la formulación, evaluación, ejecución del proyecto y luego, a su puesta en marcha. Si bien este proceso de transformación adquiere en la práctica matices distintos para cada proyectos es posible observar que en todos los casos se dan algunas características que permiten efectuar una cierta generalización de éste.
La trayectoria de todo proyecto, que se materializa generalmente en una obra física, constituye su ciclo de vida. Más específicamente, ciclo de vida de un proyecto es el proceso de transformación de las ideas de inversión y el paso de los proyectos durante su vida a través de los estados de preinversión, inversión y operación.
ESTADO DE PREINVERSIÓN
En este estado se prepara y evalúa el provecto de manera de obtener de el, el máximo excedente económico a lo largo de su vida útil, realizando para esto estudios de mercado, técnicos, económicos, financieros y otros que aseguren al mismo tiempo optimizar beneficios y minimizar costos. La selección de los mejores proyectos de inversión es decir, los de mayor bondad relativa y hacia los cuales deben destinarse preferentemente los recursos disponibles, constituye un proceso que sigue etapas secuenciales. Estas etapas son:
1. Generación y análisis de la idea de proyecto
2. Estudio en el nivel de perfil
3. Estudio de pre factibilidad
4. Estudio de factibilidad
Cada etapa se presenta en la forma de un informe respectivo, cuyo objetivo fundamental es presentar los elementos que intervienen orientados claramente a la toma de decisión de abandonar la idea o proseguirla. Los informes por lo general deben contener los siguientes aspectos:
1. Diagnostico.- que consiste en una descripción cifrada del problema que da origen a la idea del proyecto: aclara por qué el proyecto planteado viene a solucionarlo en parte o totalmente. Es una justificación del proyecto como idea.
2. Metodología de evaluación.- que indica paso a paso cómo se calcularán los beneficios netos del proyecto: ello implica, entre otros aspectos, definir exactamente la situación o situación sin proyecto contra la cual este se comparara, es decir, qué ocurrirá durante el horizonte de evaluación si no se realiza el proyecto. También implica establecer la separabilidad del conjunto de actividades que representa el proyecto, dando paso así a sub proyectos que deben evaluarse independientemente.
3. Análisis de factibilidad.- que persigue determinar claramente los beneficios netos esperados del proyecto, construyendo el perfil de los flujos de beneficios y costos en el tiempo, los que se obtienen del análisis de los aspectos de mercado, tecnológicos, administrativos, legales y financieros del proyecto.
4. Evaluación propiamente dicha.- que valora los beneficios netos del proyecto y conduce a conclusiones específicas sobre el asunto de modo que la decisión que se tome sea clara respecto a sus limitaciones y/o riesgos.
ANÁLISIS DE LA IDEA DE PROYECTO
La generación de una idea de proyecto de inversión surje como consecuencia clara de necesidades insatisfechas, de políticas generales de un plan de desarrollo, de la existencia de otros proyectos en estudio o en ejercicio, que requieren complementación mediante acciones en campos distintos, etc. En el planteamiento y análisis del problema corresponde definir la necesidad que se pretende satisfacer estableciendo su magnitud señalar a quienes afectan las deficiencias detectadas (grupos, sectores, regiones o la totalidad del país).
Se requiere indicar los criterios que han permitido identificar la existencia del problema, verificando la confiabilidad y pertinencia de la información utilizados. De tal análisis surgirá la especificación precisa del bien que se desea construir o el servicio que se pretende dar. Asimismo, en esta etapa corresponde identificar todas las alternativas de solución del problema previamente detectado. Respecto de la idea de proyecto definida, en una primera instancia, el análisis deberá servir para adoptar la decisión de abandonarla, postergar su estudio, o profundizarla.
ESTUDIO EN EL NIVEL DE PERFIL
La elaboración del perfil debe incluir un análisis preliminar de los aspectos técnicos, de los estudios de mercado y los de evaluación. Para su realización se utilizarán cifras estimadas que incluyan cuando corresponda, una aproximación gruesa a los costos y beneficios. Este análisis permitirá elaborar el perfil de proyecto y deberá considerar un mínimo de elementos, de modo de evitar el rechazo de la idea a causa de la carencia o poca precisión de la información aportada. En la evaluación se deben identificar y replicar los beneficios y costos del proyecto, para lo cual se requiere definir la situación “sin proyecto”, es decir, prever qué sucedería en el horizonte de evaluación si este no se ejecutara. El perfil permite, en primer lugar, analizar la viabilidad técnica de las distintas alternativas propuestas, descartando aquellas que no son factibles técnicamente. Dependiendo del resultado del estudio a nivel de perfil es posible adoptar algunas de las siguientes decisiones:
a) Profundizar el estudio en los aspectos del proyecto que lo requieran. Para facilitar esta profundización conviene formular claramente los términos de referencia de tales estudios.
b) Ejecutar el proyecto con los antecedentes disponibles en esta etapa, siempre que se haya llegado a un grado aceptable de certidumbre respecto de la conveniencia de materializarlo.
c) Abandonar definitivamente la idea
d) Postergar la e ejecución del proyecto.
ESTADO DE INVERSIÓN
Se realizan todas las acciones tendientes a ejecutar físicamente el proyecto o programa tal como fue especificado en la preinversión, a fin de concretar los beneficios netos estimados en la misma. En este estado se distinguen dos etapas principales: la etapa de diseño y la de ejecución. DISEÑO
En esta etapa se requiere elaborar la configuración de las características de arquitectura y de ingeniería, ajustar detalles finales previos a la ejecución tales como disponibilidad y características del terreno o áreas de influencia con el objeto de reducir los riesgos inherentes a todo proyecto de inversión.
EJECUCIÓN
En esta etapa corresponde la ejecución física del programa o proyecto, es decir, la construcción del bien capital definido en el estudio del proyecto.
Consiste en poner en marcha los proyectos y concretar los beneficios netos y estimados en el estado de preinversión.