La ética profesional del contador de costos

Se institucionalizó la distinción entre la contabilidad administrativa y la contabilidad financiera en los Estados Unidos en 1972, cuando el Institute of Management Accountants (IMA), anteriormente la Nacional Associations of Accountants, que es la asociación más grande de contadores internos en los Estados Unidos, estableció un programa que llevaba a un Reconocimiento de Contador Administrativo Titulado (CAT). Contador administrativo Titulado (CAT) es el título profesional para los contadores administrativos y ejecutivos financieros. Es la contraparte del contador interno del Contador Público Titulado (CPT). El apéndice D al final del texto, analiza adicionalmente los exámenes profesionales para los CATs y los CPTs, lo mismo que las asociaciones profesionales de contadores administrativos en otros países.

 

Los contadores administrativos tienen una obligación ante las organizaciones a las que sirven, a su profesión, al público, y a sí mismos, de mantener las normas más elevadas de ética en su conducta. En reconocimiento de esta obligación, el Institute of Management Accountants (Instituto de Contadores Administrativos) ha adoptado las siguientes normas de conducta ética para los contadores administrativos. Es punto integral la adhesión a estas normas para alcanzar los objetivos de la contabilidad administrativa. Los contadores administrativos no cometerán actos contrarios a estas normas, ni perdonarán la comisión de dichos actos por otras personas dentro de sus organizaciones.

 

Competencia

Los contadores administrativos tienen la responsabilidad de:

  • Mantener un nivel apropiado de competencia profesional por un desarrollo de sus conocimientos y habilidades.
  • Desempeñar sus actividades profesionales de acuerdo con las leyes y reglamentos y estándares técnicos relevantes.
  • Preparar informes y recomendaciones completas y claras, después de un análisis apropiado de información relevante y confiable.

Confidencialidad

Los contadores administrativos tienen la responsabilidad de:

  • Abstenerse de revelar información confidencial adquirida en el curso de su trabajo, excepto cuando se les autorice, a menos de que legalmente estén obligados a hacerlo.
  • Informar a sus subordinados, según sea apropiado, respecto de la confidencialidad de la información adquirida durante el curso de su trabajo, y controlar sus actividades para asegurar el mantenimiento de esa confidencialidad.
  • Abstenerse de usar, o parecer que usan, información confidencial adquirida en el curso de su trabajo para obtener una ventaja poco ética o ilegal, ya sea personalmente o por medio de terceras personas.

 

Integridad

Los contadores administrativos tienen la responsabilidad de:

  • Evitar conflictos reales o aparentes de interés, e informar a todas las personas apropiadas de cualquier conflicto potencial.
  • Evitar participar en cualquier actividad que obstaculice su capacidad para cumplir con sus funciones con apego a la ética. .
  • Rechazar cualquier regalo, favor o atención que pudiera influir, o que pudiera parecer que influye en sus acciones.
  • Abstenerse de subvertir, ya sea activa o pasivamente, el logro de los objetivos legítimos y éticos de la organización.
  • Reconocer y comunicar las limitaciones profesionales u otras restricciones que pudieran evitar un juicio responsable o un desempeño exitoso de alguna actividad.
  • Comunicar información, tanto desfavorable como favorable, y juicio u opiniones profesionales.
  • No involucrarse o apoyar cualquier actividad que pudiera desacreditar a la profesión.

 

Objetividad

Los contadores administrativos tienen la responsabilidad de:

  • Comunicar la información imparcial y objetivamente.
  • Revelar plenamente toda la información relevante que razonablemente pudiera esperarse influyera en la comprensión de un presunto usuario de los reportes, comentarios y recomendaciones presentadas.