La página web artículos informativos.com, detalla algunas ventajas de la Consolidación de Debito / Crédito, como:
– La ventaja primaria derivada del uso de los servicios de la consolidación del crédito es que uno consigue sus cuentas de la tarjeta de crédito bajo control.
– Otra ventaja derivada de la consolidación de deuda es que el deudor puede reducir la tensión que experimentan cuentas sin pagar excesivas. En vez de tener que ocuparse de los centenares de llamadas telefónicas recibidas de los colectores de cuenta, el deudor consigue pagar sus cuentas. En vez de tener una serie de cuentas que se tratarán, el deudor consigue todas sus cuentas cogidas para arriba. Así, son entonces responsables de guardar las cuentas corrientes y de pagar el préstamo. Por consiguiente, se parece que la consolidación de deuda financia oportunidades nuevas que puede servir como segunda ocasión para alguno, por lo menos financieramente”
Según la cantidad de tarjetas de crédito que se tengan y la disponibilidad de dinero para poder enfrentar el pago cada fin de mes es necesario hacer un estudio del mismo para poder tener un mayor y mejor control sobre las mismas y que no se escapen de nuestras manos, para no caer en sobreendeudamiento y terminando pagar mucho más debido a los intereses ocasionados por la facturación así como los costos del dinero plástico.
Desde el momento en que se tiene la leve sospecha en la que se pueda caer en problemas de pago, se debería solicitar ayuda a la entidad financiera en la que se tenga una tarjeta de crédito con una mayor línea de crédito, para así conseguir la consolidación de deuda de las demás tarjetas de crédito.
Existen campañas en las entidades financieras peruanas donde promocionan este producto financiero, logrando ordenar las finanzas de sus clientes y así centralizar el pago en una sola entidad, sin tener que pagar excesos como mantenimiento de tarjetas, membresías, seguros de desgravamen; lo que es de gran ayuda y alivio para poder ahorrar de manera significativa y destinarlo para el bienestar familiar.
Samuel Sánchez, gerente de tarjetas de crédito del BBVA, señala que, “nunca es buen momento para estar muy endeudado, y con la actual situación menos aún. De hecho, lo recomendable sería tener sólo una tarjeta de crédito que se debe escoger (en orden de importancia) por la tasa de interés, la línea de crédito y los beneficios adicionales que ofrezca (como millas, seguros, puntos para consumo u otros)”
Si se es realmente disciplinado y ordenado se puede tener más de una tarjeta sin que ello represente problemas potenciales. Pero no es la situación de la mayoría de limeños: en el mes de setiembre del 2008, el promedio de las personas tenía 2,5 tarjetas.
Y eso si es un riesgo grande: el colapso del sistema en el Perú hacia finales de la década del 90 nos tomó por sorpresa: las personas financiaban sus gastos corrientes con las tarjetas. Ocurría que tenían varias tarjetas para poder pagar los montos mínimos de una disposición en efectivo (a tasas de hasta 85%) de otra. Eso es lo que se llama “carruselear” y en los que deviene es en la generación de una deuda que era varias veces más grande.
Costa, A. (2009), en su artículo Ahorre solicitando una compra de deuda al banco considera lo siguiente: “Tener más de una tarjeta de crédito puede servir para impresionar a los demás al abrir la billetera, pero no es una buena idea si se quiere tener las finanzas bajo control”
En un contexto como el actual, en el que hay incertidumbre sobre las futuras tasas y los ingresos de las personas, es una buena idea concentrar todas las deudas en una sola entidad y cancelar el resto.
Esta es una actitud acorde a nuestros tiempos, donde las crisis económicas se dan cada cierto tiempo, y sería una manera oportuna para bajar nuestro nivel de endeudamiento y tener mayor liquidez.
Estamos de acuerdo con que el dinero plástico, es una manera útil de crear una línea de crédito accesible para muchas familias, pero sin el debido control puede ocasionar mil y un problemas dentro los presupuestos familiares.
Starbuck, Emily y Woolsey, Ben (2008), “Salga del endeudamiento: consolide las deudas de tarjetas de crédito”, puntualizan lo siguiente: “Las deudas de tarjetas de crédito pueden debilitar sus finanzas personales y limitar sus opciones a la hora de gastar dinero día a día. Si tiene un saldo pendiente, tal vez este es un buen momento para considerar distintas opciones que le permitan consolidar las deudas de tarjetas de crédito”
Liberarse de las deudas es, sin duda, un objetivo alcanzable, incluso para aquellos cuyos ingresos son limitados. Sin embargo, las deudas de tarjetas de crédito son difíciles de eliminar a no ser que tenga un plan y una sana dosis de autodisciplina.
Ello se ve reflejado en la disminución de los gastos a fin de mes, y en la disposición del usuario de no caer en la tentación de usar sus tarjetas de crédito para comprar o adquirir algo innecesario optando esta vía.
Marc Diana (2008), Director General de LeadPoint, una empresa de intercambio de potenciales clientes, quien trabajó para LowerMyBills.com, comenta, “Consolidar la deuda de tarjetas de crédito en una sola tarjeta con una tasa de interés baja puede ser conveniente por varias razones. En primer lugar, le permite al consumidor controlar sus gastos más fácilmente. Además, este método le asegurará que está pagando la tasa de interés más baja posible. El consumidor ha de vigilar atentamente los cambios en las tasas de interés de las tarjetas de crédito y estará dispuesto a realizar transferencias de saldos si hace falta encontrar una oferta mejor”
Los emisores de tarjetas de crédito compiten intensamente para obtener nuevos saldos, ya que ahí es donde se genera la mayor parte de sus ganancias. Si usted solicita la tarjeta de crédito que quieren venderle, puede llegar a conseguir una tasa de interés baja o incluso una TAE introductoria del 0 por ciento para transferencias de saldos.
Tarde o temprano, la tasa baja o TAE del 0 por ciento dejará de aplicarse, pero mientras tanto el cliente inteligente habrá utilizado ese plazo gratuito para cancelar el saldo. Aquí es cuando hace falta la autodisciplina. Existe la gran tentación de comenzar a gastar de nuevo cuando se suprime temporalmente la carga de los altos costos financieros. Pero este es el momento de deshacerse del saldo pendiente y emprender el camino para salir del endeudamiento, aprovechando la consolidación en las tarjetas de crédito sin intereses.
Una vez que haya cancelado la deuda de sus tarjetas de crédito, podrá comenzar a explorar otros tipos de tarjetas de crédito para consumidores disciplinados, tales como las tarjetas de crédito con reembolsos de efectivo que, en efecto, le pagan al consumidor por efectuar sus compras cotidianas.