Vigotsky (1993) “en su opinión, la mejor enseñanza es la que se adelanta al desarrollo. En el modelo de aprendizaje que aporta, el contexto ocupa un lugar central. La interacción social se convierte en el motor del desarrollo”.
Ellis (2007), “el aprendizaje es el medio mediante el que no solo adquirimos habilidades y conocimientos, sino también valores, actitudes y reacciones emocionales”.
Beltrán y Shuell (1993) definen el aprendizaje como “un proceso que implica un cambio duradero en la conducta, o en la capacidad para comportarse de una determinada manera, que se produce como resultado de la práctica o de otras formas de experiencia”.
Chance, P. (2001) sostiene que “el aprendizaje permite al organismo evolucionar a nuevas formas de conducta de modo muy rápido. A través del aprendizaje, el organismo puede encontrarse con los retos creados por los cambios abruptos del medio. Esto obviamente fortalece las oportunidades individuales para sobrevivir.
Para propósitos de la presente investigación, conceptuaremos al aprendizaje como el proceso de adquisición de conocimientos conceptuales, procedimentales y actitudinales que manifiestan una conducta estable y perdurable en el tiempo que se da a través de la experiencia física, cambio de estructuras mentales y hechos conexos a ella en la comprensión y producción de textos orales y escritos en un contexto comunicacional durante toda la vida.
Tipos de Aprendizaje
A. Aprendizaje de contenidos conceptuales
Definición de concepto
Ellis, J. (2005), “el concepto es una clase de objetos o de hechos que comparten una o más similitudes”. Algunos conceptos se definen por características fácilmente observables y son bastante fáciles de aprender. Por ejemplo, la palabra leche se refiere a un líquido blanco con un sabor determinado. Otros conceptos se definen mediante atributos menos destacados, de forma que se aprenden más lentamente y es más fácil que se confundan. Por ejemplo, las estaciones del año se definen por los solsticios y equinoccios, de lo que no somos conscientes la mayoría de las personas.
Tipos
A. El aprendizaje de contenidos conceptuales
• Los conceptos son más fáciles de aprender cuando las características definitorias destacan y las características irrelevantes no. Cuanto más sobresalientes son los casos positivos, más fácil es dominar el concepto.
• La multitud y variedad de casos positivos ayuda a ilustrar un concepto. Al encontrarse muchos casos de conceptos, el individuo se puede formar un prototipo de él.
• Las tareas de evaluación en el aula pueden favorecer, así como guiar el aprendizaje de conceptos.
• La reconstrucción de los conocimientos previos para construir estructuras conceptuales nuevas, generando con ello crecimiento individual y la formación de individuos con mayor capacidad en la solución de problemas.
B. El aprendizaje de contenidos factuales
Aprender hechos supone en síntesis, repetición, memorización, las que a su vez requieren de estrategias que permitan una asociación significativa entre ellos y otros conceptos o situaciones. Para ello, se usan listas o agrupaciones significativas, cuadros o representaciones gráficas, visuales o asociaciones con otros conceptos fuertemente asimilados.
Relación entre conceptos y principios
Los conceptos aluden a un conjunto de hechos, objetos o símbolos que tienen características comunes (mamífero, ciudad, potencia, concierto); y los principios, a los cambios en los hechos, objetos o situaciones en relación con otros (leyes de termodinámica, principio de Arquímedes, el tercio excluido, etc.).
C. Aprendizaje de contenidos procedimentales
Adquisición del conocimiento procedimental
Ellis (2005) “algunos procedimientos que aprendemos a lo largo de nuestra vida, tales como sembrar un árbol, destacar en el vóleibol, consisten fundamentalmente en conductas observables. Sin embargo, muchos otros procedimientos, por ejemplo escribir un ensayo, solucionar una ecuación, poseen también un importante componente mental”.
Anderson (1983), citado por Ellis, J. (2005), menciona que “primero se adquiere el conocimiento declarativo; después, con la práctica, este evoluciona gradualmente a un conocimiento procedimental”.
Willingham y Goedert (1999), citados por Ellis, J. (2005), mencionan que “las personas aprenden simultáneamente tanto la información como las conductas mientras están aprendiendo un procedimiento nuevo. Sin embargo, las personas aprenden la información con mucha rapidez, mientras que las conductas apropiadas se adquieren de una manera más paulatina e implícita”.
Anderson y Gagne (1995), citados por Ellis (2005),
Mencionan que “los procedimientos se pueden describir como una serie de reglas del tipo: “SI…, ENTONCES”. Por ejemplo, los procedimientos para montar en bicicleta incluirían reglas como:
1. Si quiero ir a más velocidad, entonces pedaleo más rápido.
2. Si quiero ir a menos velocidad, entonces pedaleo menos rápido.
3. Si hay un objeto enfrente de mí, entonces tengo que doblar a la derecha o izquierda.
4. Si quiero parar, entonces aprieto los frenos del manillar”.
Condiciones para el Aprendizaje Procedimental
La realización de las acciones que conforman los procedimientos es una condición fundamental para el aprendizaje: se aprende a hablar, hablando; a dibujar, dibujando; a observar, observando.
La ejercitación múltiple es necesaria para el aprendizaje de una técnica; no basta con realizar alguna vez las acciones del contenido procedimental, hay que realizar tantas veces como sean necesarios las diferentes acciones o pasos de dichos contenidos de aprendizaje.
La secuencia de los contenidos procedimentales: aprendizaje de técnicas – aprendizaje de estrategias.
Para organizar una adecuada secuencia de contenidos procedimentales conviene asegurar primero el dominio de aquellos procedimientos considerados como básicos. Es decir, que respondan a necesidades urgentes a satisfacer, como por ejemplo la manipulación correcta de los objetos utilizados en el laboratorio. Asegurar también el aprendizaje de aquellos procedimientos que resulten más potentes que otros de cara a la solución de tareas, o como requisito para otros aprendizajes.
D. Aprendizaje de contenidos actitudinales
Sarabia y otros (1994), sostiene que “son constructos que median nuestras acciones y que se encuentran compuestas de tres elementos básicos: un componente cognitivo, un componente afectivo y un componente conductual. Se refiere a la motivación generada en el espacio y tiempo que dura el proceso de enseñanza y aprendizaje, reestructurando actitudes congruentes para aprender”.
Las actitudes se podrían definir como: “tendencias o disposiciones adquiridas y relativamente duraderas a evaluar de un modo determinado un objeto, persona, suceso o situación y a actuar en consonancia con dicha evaluación”. Son disposiciones afectivas y racionales que se manifiestan en los comportamientos; por ello, tienen un componente conductual (forma determinada de comportarse), rasgos afectivos y una dimensión cognitiva no necesariamente consciente.