Es muy importante poder contar con un buen historial crediticio y mantenerlo en buen estado aun es un reto mayor. Dado a que se te pueden abrir o cerrar muchas puertas debido a esto.
Lawrence J. Gitman (2003), autor del libro Fundamentos de Administración Financiera expresa lo siguiente: “Sujeto de Crédito; es la persona natural o jurídica que reúne los requisitos para ser evaluado y posteriormente ser favorecido con el otorgamiento de un crédito, en efectivo o venta de un articulo con facilidades de pago. Estos requisitos están comprendidos en la política de créditos de la empresa que otorga dicho crédito”
Esta persona debe mantener un récord crediticio impecable dentro de lo posible. Debe cumplir con pagar sus cuotas o gastos en la fecha pactada con la empresa o entidad que le otorgo la tarjeta o crédito. Cuando a alguien se le otorga un crédito por primera vez, es difícil lograr la confianza de una entidad financiera pero gracias al empleador o a los ingresos que sustente empezará con una línea de crédito acorde para luego incrementar de acuerdo a su capacidad y comportamiento de pago.
El Comercio, en su artículo “Sujetos de crédito a pesar de la crisis internacional”. Opinión Secc. A (2009:4), menciona que, “debido a la coyuntura vivida el año 2009; la decisión de la superintendencia Nacional de Banca, Seguros y AFP (SBS), “de reprogramar las deudas pendientes por préstamos hipotecarios, de comercio, consumo y microcréditos es, sin duda, un respiro para muchas personas naturales y jurídicas, con un buen historial crediticio pero que por imponderables o factores coyunturales no pueden honrar dichas obligaciones en los plazos previstos”
Estas medidas implementadas por organismos ligados estrechamente a las entidades financieras, son sinónimo del respaldo para quiénes responden en forma favorable y se preocupan de mantener un récord crediticio impecable. Asimismo, es una forma de prever y evitar posibles problemas futuros que son provocados por circunstancias ajenas a los del contexto nacional, que se ven reflejados en nuestro ámbito económico por el hecho de que pertenecemos a un mundo globalizado. En donde las crisis económicas se ven reflejadas aunque sea en una mínima expresión en economías un tanto estables como la nuestra.
El Banco Nacional de Comercio Exterior S.N.C (BANCOMEXT), (2004), señala que, “los bancos buscan realizar operaciones seguras y exitosas, preferentemente con clientes cuya experiencia ha sido satisfactoria en el ejercicio y liquidación de sus compromisos, así como son empresas o empresarios que presenten proyectos de inversión viables.
Algunas de las consideraciones que le permitirán conocer que tan buen sujeto de crédito es usted, o su empresa son:
Experiencia: referida en primera instancia, al cumplimiento histórico de sus obligaciones donde si usted es cumplidor puntual de sus pagos es un excelente candidato. Solvencia económica y moral: usted puede calificarse como sujeto de crédito en la medida en que cuente con personas a quienes les cumple invariablemente los compromisos que asume ante ellos y que, como referencia, lo respaldaran ante terceros”
En cuanto a la experiencia se toma en cuenta para la evaluación su experiencia con relación a cuánto tiempo lleva en la actividad, ya que eso es relevante para determinar la solidez del negocio o de la persona. Es un factor de estabilidad, que se evalúa en cada solicitante de crédito y que, usualmente, denota que tanto conoce y domina usted su mercado. Transmite credibilidad de que el manejo de su negocio e ingresos serán suficientes para cubrir sus obligaciones económicas.
De acuerdo a como se cumplan con las obligaciones contraídas ante terceros una persona o tarjetahabiente va forjando su historial crediticio y será considerado como sujeto de crédito siempre y cuando cumpla en las fechas pactadas. Muchos bancos toman en consideración este aspecto y sirven como medio para la evaluación constante de un crédito así como para las mejoras futuras en las líneas de crédito o incorporarlos en un selecto grupo de clientes (Scoring de Comportamiento).
Por otro lado, para el Banco de la Nación (Perú) existen sujetos de crédito teniendo en cuenta lo siguiente: “para los casos de trabajadores con contrato a plazo determinado, solo podrán acceder a este préstamo los trabajadores contratados a plazo determinado a partir de un (1) año de servicio y por un plazo máximo de 04 años. Asimismo deberá presentar un garante nombrado o pensionista con ingreso similar, y pertenecer a una entidad que ha suscrito Convenio o Addenda de Descuento por Planilla. El cliente debe tener al menos una deuda en el Sistema Financiero, la cual será liquidada/consolidada por el Banco de la Nación”
Cada entidad financiera tiene facultades para considerar sujetos de créditos de acuerdo a diversos criterios, los que los respaldará en la evaluación crediticia. De igual modo, los plazos se consideran de acuerdo al máximo establecido para las condiciones de los contratos de los trabajadores públicos en este segmento. De esta manera el banco tiene respaldada la deuda ya que se descuenta en forma directa el Descuento por Planilla del trabajador o garante que en forma solidaria se presentan para acceder a los préstamos.
Blume, C. (2010), en su artículo “Crédito vs. Sueldo”, manifiesta lo siguiente: “Hemos creado sujetos de crédito, con el sueldo como garantía. De otra forma se requeriría de un fiador o un ingreso bastante mayor para ser sujeto de crédito.
Hoy los bancos compensan deudas impagas contra cualquier cuenta, incluso la de remuneraciones. Prohibir esto hará que la gente que tiene menos tenga mucho menor acceso al crédito”
En el párrafo anterior se discute sobre la realidad con las que las personas acceden a un préstamo o tarjetas de crédito. No se deben restringir las libres decisiones de las personas. Los bancos deben informar transparentemente a todos los que van a pedir créditos sobre las condiciones de éste y de los postulantes para que las decisiones sean informadas y aceptadas en forma voluntaria, y no para recortar una mejor calidad de vida.
Ser sujetos de crédito hoy en día es un hecho relevante, ya que es una manera para conseguir cierto status tanto social como económico.
A la vez, se puede distinguir las diferencias bien marcadas, entre las personas con mayor poder adquisitivo donde tienen cierto respaldo en función a sus deudas, y otras que por tener un buen comportamiento de pago, se les asigna una mayor línea de crédito, pero no tienen respaldo extra, lo que hace que se sigan endeudando continuamente contra sus ingresos dependientes.